Resumen

El hipoclorito sódico (lejía), el cáustico más accesible y las consecuencias de su ingesta

María Codinach-Martín1, Jordi Puiguriguer-Ferrando2, Pere Planellas Giné3, María Àngels Gispert-Ametller1, María del Carmen Rodríguez Ocejo2, Antoni Codina Cazador3

Filiación de los autores

1Servicio de Urgencias, Hospital Doctor Josep Trueta, Girona, España. 2Servicio de Cirugía General, Hospital Doctor Josep Trueta, Girona, España. 3Servicio de Urgencias, Hospital Son Espases, Palma de Mallorca, España.

DOI

Cita

Codinach-Martín M, Puiguriguer-Ferrando J, Planellas Giné P, Gispert-Ametller MA, Rodríguez Ocejo MC, Codina Cazador A. El hipoclorito sódico (lejía), el cáustico más accesible y las consecuencias de su ingesta. Rev Esp Urg Emerg. ;:–

Resumen

INTRODUCCIÓN. La lejía (hipoclorito sódico) es un producto cáustico que suele estar presente en la mayoría de los hogares de nuestro país.
OBJETIVO. Analizar específicamente las consecuencias derivadas de las ingestas de lejía en dos servicios de urgencias.
MATERIAL Y MÉTODOS. Estudio observacional, descriptivo y retrospectivo de los datos clínicos de los pacientes atendidos tras ingesta de hipoclorito sódico en dos servicios de urgencias durante 7 años (2015-2021). Se analizan variables epidemiológicas, clínicas y asistenciales, así como el grado de adhesión a los protocolos asistenciales vigentes.
RESULTADOS. Se registraron 102 pacientes atendidos tras causticaciones digestivas por lejía. El 61,2% fueron mujeres con una edad media de 42,5 años (DE 24,7). El 15,69% de casos correspondieron edad pediátrica. En 65 ocasiones (63,7%) la ingesta fue accidental. Se realizó fibrogastroscopia en el 42%, objetivándose lesiones de gravedad (Zargar > IIa) en 2 casos, y estudio tomográfico en el 7,8%. Un 82,3% recibieron algún tratamiento médico, generalmente inhibidores de la bomba de protones (92,9%). Ningún caso precisó intervención quirúrgica. Un 80,2% de los casos fueron leves, mientras que ingresaron el 19,9%, 3 en unidad de cuidados intensivos. Ninguno falleció. La gravedad se relacionó con ingestas voluntarias suicidas (p < 0,001), con cardiopatía o patología psiquiátrica previa (p = 0,003), o con síntomas digestivos iniciales (vómitos p = 0,025, o epigastralgia p = 0,037). Las ingestas diluidas o accidentales fueron siempre leves (p < 0,001). Hubo un sobretratamiento en el 80,85% (n = 38) de los casos en los que se
incumplió el protocolo, sin trascendencia en la evolución del episodio.
CONCLUSIONES. Las ingestas de hipoclorito sódico son las más prevalentes, por lo que debe protocolizarse su asistencia. Generalmente tienen buen pronóstico, pero deben alertar las ingestas voluntarias suicidas, los pacientes con antecedentes psiquiátricos y cardiológicos, así como la presencia de síntomas digestivos y orofaríngeos.

 

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